Dietas milagro: no te las creas. El que algo quiere...

... algo le cuesta.

Hace un par de semanas leí en una revista un comentario que más o menos decía así: "hay tantas dietas milagro como idiotas que se deciden a seguirlas".
Y me dio alegría leerlo, porque muchas veces oímos que son un timo, sí,... "pero esta dieta es verdad. Esta sí". Luego pasa de moda y ya no se la cree nadie. Resultado: las personas que la han seguido consiguen una reducción de peso durante un periodo de tiempo (es el tiempo en el que esa dieta sí funciona y no es un timo) y quien la vende, se ha llenado el bolsillo.
Pero el problema sigue. Si los índices de obesidad hubieran reducido con el aumento de adherencia a estas dietas, la obesidad sería en España una enfermedad erradicada, como la peste. Pero resulta que la realidad no es esa precisamente. La Revista Española para la Obesidad acaba de publicar una extensa revisión de recomendaciones para la obesidad.  
Entre otras, se señalan como condiciones que debería cumplir el tratamiento dietético de la obesidad:

• Ha de ser realizable por un espacio de tiempo prolongado.
• Debe ser eficaz a largo plazo, esto es, ha de mantener el peso perdido.
• Ha de prevenir futuras ganancias de peso.
• Tiene que conllevar una función de educación alimentaria que destierre errores y hábitos de alimentación inadecuados.
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¿Te has convencido de que más vale hacer las cosas bien??? Claro, eso supone mojarse en casa y comprometerse mucho. Tú decides!